y el cielo burbujeaba como si fuera champagne
lunes, enero 01, 2007
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Koi es el kanji que describe al amor lleno de pasión, aunque egoísta. Los peces típicos de los estanques japoneses y chinos también se conocen como koi y suelen protagonizar mitos, leyendas, fabulas e historias. Simbolizan la perseverancia; en algunos relatos se dice que logran trepar caídas de agua y convertirse en dragones. Son una representación de la sabiduría, el conocimiento y la longevidad. Algunos enormes kois protagonizan Der Fischer und seine Frau, una película de Doris Dörrie, que habla de pasión, de perseverancia y de magia. Y ahora forman parte de mi header. Para no olvidarme de algunas cosas, para tener siempre presentes otras.
4 comentarios:
Porque claro, no había otra manera de festejar un año nuevo que empieza en lunes...
El champagne es color champagne. Raro. Como la naranja color naranja y el papel dorado, que es color dorado.
Yo soy color georges.
a veces es...
después hice terrible metáfora de que el año empezaba con champagne porque así seguíamos el ejemplo de las burbujas y nos íbamos para arriba... a veces desearía ser más prácticamente paloma.
Yo creo que somos champagne para volar-floatingontheair- y al llegar más alto, tan alto, manos ajenas pinchando las burbujas cerebrales con furia.
Por eso.
Nade en whisky, no hace ni olas.
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